¿Qué es una centralita IP y para qué sirve?
Para entender que es una centralita IP es importante conocer qué es una centralita en sí. Una centralita telefónica es un dispositivo/ terminal en el que se conectan las líneas del operador de telecomunicaciones con las extensiones de una organización, por lo que la finalidad de una centralita es la de gestionar las llamadas telefónicas. Por lo tanto, una centralita IP gestiona las llamadas telefónicas de una organización, pero a través del protocolo IP, el cual permite manejar esas llamadas a través de la Red.
Diferencia entre centralita IP y centralita tradicional
La diferencia entre una centralita IP y una centralita tradicional es que la centralita IP emplea el protocolo IP que permite la gestión de llamadas a través de la Red, es decir, Internet, y la centralita tradicional gestiona las llamadas a través de líneas convencionales analógicas.
Ventajas de una centralita IP
Algunas de las ventajas que ofrece la centralita IP son:
- Basado en el protocolo IP. Lo que permite establecer comunicaciones mediante Internet y disfrutar de la tecnología VoIP.
- Ahorro en costes. Tanto en la instalación como en el mantenimiento.
- Simplicidad, a la hora de crear una infraestructura de comunicación en una organización.
- Flexibilidad, pues permite la conexión desde cualquier parte del mundo al utilizar Internet.
Tipos de centralitas IP
Actualmente podemos encontrar diferentes tipos de centralitas IP:
- Centralita híbrida. Se trata de una centralita telefónica tradicional física que emplea líneas tanto analógicas como digitales a través de la telefonía IP o protocolo IP. En resumidas cuentas, la centralita híbrida tiene la ventaja de gestionar las llamadas de manera analógica o digital, empleando una u otra manera de comunicación según las necesidades de cada organización.
- Centralita IP física. Se trata de una centralita telefónica alojada en un servidor físico y que emplea las ventajas de la tecnología VoIP.
- Centralita IP virtual. Se trata de una centralita telefónica alojada en un CPD externo (Centro de Procesamiento de Datos), y que emplea la tecnología VoIP. Una de las ventajas de este tipo de centralitas es que permite tener varias extensiones en diferentes ubicaciones geográficos además de no tener que realizar ninguna instalación de cableado.
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